Es como si fuera un “acción de gracias” en el que se come chivo el 30 de mayo de cada año
Una familia de la Capital ha celebrado durante 49 años, la noche del 30 de mayo, la “cena del chivo”, una tertulia donde concurren decenas de amigos y relacionados, más que a celebrar el ajusticiamiento del tirano Rafael Trujillo, a ponderar los beneficios de la vida en democracia.
Aunque se ha realizado sin publicidad alguna, Adolfino Candelaria (Papito) quiso que el encuentro de este año fuera dado a conocer, porque el de 2012 será el número 50 “y sin dudas alguna tiene que ser algo especial”.
A la casa de Papito y Elisa Candelaria, en el ensanche Evaristo Morales, acuden cada año médicos, abogados, ingenieros, políticos, militares, profesores universitarios y escritores a degustar una rica cena cuyo plato principal es chivo.
El anfitrión cuenta que la primera vez lo hizo solo, para la misma fecha de 1962, pues aún no se había casado, y entró al desaparecido restaurante Mario, en la avenida Bolívar, donde ordenó un servicio de chivo.
En los siguientes años, cuenta el militar retirado, ha compartido con amigos e incluso con sus nietos, ya que sus hijos han asumido el compromiso de mantener la tradición.
Entre los habituales de este “sansguivin”, Candelaria menciona al doctor Antonio Thomén, Juan José Ayuso, Roberto Cassá, Rolando Tabar, César Scarfullery, Luis Scheker Ortiz y Emilio Cordero Michel, presidente de la Academia de la Historia.
Por igual, Raúl Pérez Peña, Virgilio Pérez Contreras, José Antonio Mauricio, William García Duval, Geanilda Vásquez, Vicenta Vélez y Claudio Caamaño y su esposa.
En vista del 50 aniversario del ajusticiamiento de Trujillo, la reunión de este año se adelantó para el sábado 28, ocasión en que Candelaria se refirió a los pronunciamientos de la señora Angelita Trujillo, hija del sátrapa, y dijo que debería estar presa, pues no fue una espectadora durante la tiranía, sino que estaba en el terreno de los hechos, es responsable de muchos atropellos”.
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